Seleccionar página
Pesimismo Inteligente

04

nov, 2019
Pesimismo: propensión a juzgar las cosas por su aspecto más desfavorable o negativo. El término fue introducido por el filósofo francés Voltaire en el siglo XVIII como una forma de oponerse al término optimismo que había creado el alemán Leibniz.
Uno de los objetivos de este post en relación con el pesimismo es que comprendas que no hay nada malo en ver el lado desfavorable de las cosas. Lo importante es lo que haces a partir de ahí. Si lo tomas como un punto final y excusa para rendirte supondrá una limitación. Si por el contrario lo utilizas como estímulo para hacer algo al respecto, puede resultar enriquecedor.

Ver el vaso medio vacío sería la característica típica del pesimismo. Es tan popular que ni nos la cuestionamos. Por su imprecisión es un error porque no se hace alusión al contenido del vaso y es importante. Si se tratase de una de esas desagradables papillas de contraste que debes ingerir para una prueba médica…el optimista verá el vaso medio vacío y ver el vaso medio lleno será cuestión de pesimismo.

Martin Selligman, precursor de la psicología positiva, introdujo la idea de optimismo inteligente. Ver más allá de lo negativo y poder convertir la experiencia que se nos presente en una oportunidad para avanzar.

La realidad es que llegó a vincularse el optimismo con ignorancia en el sentido de negación de la realidad. Ser feliz por ser feliz sin prestar atención a los hechos. El optimismo inteligente sería una actitud que pretende obtener el beneficio potencial de cualquier situación…

La misma actitud puede mantenerse desde la perspectiva del pesimismo, si vas más allá del sentimiento propio de la evaluación de la realidad implícita en el pesimismo.

Hay un sesgo a vender la idea de positivo como mejor que no es siempre acertada. Ver el vaso medio vacío, el pesimismo, puede ser un estímulo para buscar más agua.
Igualmente, si piensas que algo puede salir mal, tienes un motivo para poner en marcha más conocimiento, recursos o habilidades de las que hasta ahora has utilizado.

A veces, cuando intentamos ayudar a otras personas, tratamos de cambiar lo más difícil sin darnos cuenta de que otros cambios son posibles. Si estás acostumbrado a ver lo desfavorable de una situación, pretender cambiarlo en ver la misma situación de manera favorable, puede suponer un desafío demasiado exigente para algunas personas. Quizás esa manera de mirar el mundo forma parte de tu manera de entenderlo, es así como eres.

Un cambio diferente puede consistir en lo que haces a partir de ahí. Puedes aceptar ese aspecto desfavorable, pero no detenerte, sino preguntarte: “¿qué puedo hacer al respecto…?” quizás eso te permita no quedarte estancado en la situación.

No pretendo hacer un post de exaltación al pesimismo, tampoco del optimismo, pero sí hacerte pensar.

Hay un cambio mayor que es posible: comprender que tanto pesimismo como optimismo son valoraciones de una realidad que puede ser apreciada en si misma.
Que un vaso con agua es algo digno de aprecio antes incluso de evaluar si esta medio lleno o medio vacío y lo positivo o negativo que esto pueda parecernos.

A lo largo de nuestra evolución hemos desarrollado muchas habilidades que por “naturales” nos pasan desapercibidas y también podríamos apreciar. El uso inapropiado de las mismas es fuente de mucho sufrimiento. Dar valor, crearlo, es un privilegio reservado a los seres humanos que puede brindarnos felicidad o sufrimiento según el caso. Sea como sea, nuestra valoración de la realidad supone una distracción tanto de la propia realidad, como del proceso de valorar y ambas cosas pueden ser apreciadas. Eso enriquece nuestra vida.

Comprender la realidad presente y apreciarla incluso, antes de evaluarla es una manera de gestionar tu mente.  Exige más esfuerzo que dejarte llevar por lo popular, pero añade mucho valor a tu vida y te permite actuar desde cimientos más sólidos. Tú decides….

Mi contacto +34 609 412 424 · maxi@sapiens.coach

Inspirado en metodología DBM® creada por John McWhirter.

Share This